lunes, 25 de febrero de 2013

ARLEQUIN EN VIAJE: y la idea de perspectiva




   Hoy mientras dibujaba mi idea diaria focalice en mi experiencia acerca del vivir y esta idea de las dimensiones, y mientras dibujaba la mano destacable no solo por sus dimensiones sino también por morfología de Florence Welch, vocalista del grupo "Florence and the Machine", armónicamente dibujada por mis manos (modestia aparte), esta mujer con su estética muy contemporánea, cara casi lavada que por sus rasgos exóticos la hacen impermeable a esa voz que en todo un conjunto traen esa imagen de Nueva york de los años "60", acompañada de una estética muy Luisa Lane Art Deco; focalicé sobre el encanto de una ciudad como Buenos Aires, sus perspectivas y dimensiones, su aspecto francés en construcciones neo renacentistas versus el Art Deco de edificios tales como el Kavanah, importante para la época y la ciudad por ser uno de los antiguos rascacielos, símbolo del crecimiento social de un país. Efectivamente, la mano de Florence paso a ser una mano aurea que me lleva  que lleva a un niño al sueño, la historia del dibujo, o a las partidas  hacia  esas dimensiones y perspectivas que la hacen propia como ciudad ENCANTADORA, por sobre todo en horarios y eslabones de tiempo donde medios naturales tales como la luz de este sol que quiere acostarse y la luna desea llegar al esplendor de su embrujo hacen de esta idea de perspectiva y dimensión un ENCANTO, han ido variando según las etapas históricas del hombre que por cuestiones  sociales y  sociológicas  hacen la idea del vivir o del saber vivir  una contención en LA CIUDAD, este Buenos Aires. La relación casi exacta entre una ciudad cosmopolita en su pensamiento, formas, costumbres, la Paris sudamericana para algunos, descriptivamente hablando. Cualquiera diría que estos bonaerenses no paran de vivir y disfrutar, el saber disfrutar la ciudad; un bien; que aparte de ser un disfrute, pasa a ser un deseo de aprender y dejarse llevar por sus ritmos, es asi  como los ritmos de la ciudad de la furia te transportan hacia esa dimensión, tal como la mano de Raquel Welch lleva al niño al sueño, sueño que en Buenos Aires pasa a ser una realidad, el VIVIR. Ciudad de los sueños, mi sueño y el de muchos, en mi caso la realización en aquella ciudad que me ha dado grandes sensaciones buenas y malas para cualquier humano pero a su vez con su encanto me hacen volver y disfrutar como uno mas, absorbido y embelesado por esta ciudad de la furia, y me llevan al sueño, mi sueño, la realización es lo que se viene, mi enfoque desde acá lo que me da una amplia perspectiva de lo que hare, mi tiempo el actual, es así como comenzare este sueño de ciudad.